Lluvia
de Sombras - de Bea Cármina.
Magdalena, la de “Lluvia de Sombras” ha sido
predestinada a ser una nulidad. Es decir, a no ser. ¿Qué se necesita para
que este personaje trascienda su vacuidad cómoda, contemplativa y se vuelva
voluntad de acción? ¿Qué se necesita para que esta acomodaticia se sumerja en esos ríos
subterráneos negados por ella, pero que sin embargo se encuentran en su
interior, bullendo bajo capas y capas de
simulaciones y mentiras?
Ese yo salvaje al que Magdalena, negación de sí misma, suprime
sus deseos, castra su sexualidad, lo obliga a huir de la mirada del otro,
y se cobija para pasar desapercibida en un agujero asexuado por donde poder
mirar a los demás con atisbos repletos de prejuicios ¿qué se necesita
para que un no ser como Magdalena pase a “Ser”, en una acción “imposible”
que la llevaría al otro extremo, a mutarse y reconstituirse en su otro
yo?
María y Magdalena, presas entre su identidad y
alteridad van en busca de su doble. Dos caras de una misma moneda, tan lejanas
una de la otra tan repudiada María por Magdalena, tan repudiada Magdalena por
María, tan distantes y sin embargo tan cercanas, tan contrarias y sin
embargo cómplices ejecutoras que se remontan al principio de los tiempos
para llegar a ser en esa acción "infamante" podrían calificar algunos, “liberadora”, dirían otros, en la cual se
funden y se reconocen como una sola.
"Lluvia de Sombras" de Bea Cármina.
Puesta en escena y diseño lumínico Arturo Romero.
Héctor Jefté
María Karla Servín
Magdalena Bea Cármina
Música Roberto Gutiérrez
Sonidista Tato Ramírez
Asistente técnica Fer
Foro Shakespeare, Sala Urgente 1
Todos los sábados 19:15
Compre su boleto con anticipación.
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